top of page

Mediocridad copernicana


¿Somos únicos en el universo? Según el “principio de mediocridad copernicana”, la vida, como la conocemos, es algo común, dado que se tiene evidencia de que existen miles de planetas similares a la Tierra. Adicionalmente, también se asegura que la vida y los humanos solo son producto del azar y la evolución.

En un artículo de la revista Investigación y ciencia (12/2017), el astrofísico Howard A. Smith hace una interesante propuesta en torno al origen del universo, la vida y “el significado cósmico de nuestra especie”. Para él, los datos astronómicos modernos e incluso algunas conjeturas científicas apuntan a que realmente somos únicos. Habla de Copérnico, quien, contradiciendo la fe del oscurantismo medieval, planteó que la Tierra no era el centro del universo y esto, sumado al evolucionismo de Darwin, por el cual se asegura que somos seres sin propósito, colocaría a los humanos en el punto de seres ordinarios.

El autor apunta a que el descubrimiento de más de 3600 planetas con posibilidad de vida pero sin evidencia de la misma, nos haría únicos. El criterio es práctico: estamos aislados porque nadie se ha comunicado con los terrícolas ni nosotros con los extraterrestres. Más aún, en la búsqueda de vida extraterrestre, se sabe que las condiciones planetarias similares a nuestro planeta no son suficientes para que surja la vida, y de existir, resultaría complicado que se trate de vida inteligente.

De otro lado, la Tierra tardó 4 mil millones de años en aparecer y se necesitaron 600 millones más para que el planeta tomara forma, con una órbita alrededor de una estrella con radiaciones y química que permitieron la vida. Entonces la vida, tal como la conocemos, es de difícil formación pese a que ha sido posible gracias a las propias condiciones de la materia, la cual puede combinarse, volverse compleja para que surja la vida (principio antrópico).

Lo que más provoca dudas es la probabilidad de que la vida se desarrolle en un exoplaneta y en un proceso idéntico a la Tierra, con evolución hacia seres inteligentes que sobrevivan lo suficiente para establecer comunicación con otros seres. De hecho, dentro del ámbito de influencia espacio-temporal, se calcula una posibilidad en 30 millones; eso en 100 generaciones humanas tiempo que podrían explorar el universo infinito, y solo hasta 1250 años luz de distancia. Conclusión: estamos solos.

H. A. Smith plantea tres hipótesis que explicarían el origen de la vida: pura suerte, multiuniversos con posibilidades lógicas de vida y la posibilidad de que el universo se vuelve real solo si existe un observador inteligente y consciente del mismo (que es una versión controvertida de la física cuántica), que filosóficamente significaría responder ¿el universo existe fuera de nosotros o por nosotros? Pueden darse los tres fenómenos al mismo tiempo. Así, al ser poco probable que nos encontremos con otros seres inteligentes, terminaríamos siendo especiales, por tanto el principio de mediocridad copernicana no sería verdadero.

Como por el momento no existe evidencia de seres inteligentes alienígenas y más bien resultamos singulares en el universo de 13.800 millones de vida cósmica, es obligatorio cuidar la Tierra y proteger su ambiente, por ser la esencia de la vida misma.

En cuanto a la sensación de soledad, las respuestas suelen darse a través del mito, la religión o el espiritualismo, como manifestaciones del desconocimiento del proceso cósmico, sin embargo, la ciencia y el empirismo racional nos acercan de manera más real a entender la materia, el mundo y la vida.

Este artículo se puede utilizar, copiar o reproducir citando la fuentes y su autor.
genética y ciencia
cesar paz-y-miño
cesarpazymino.com
quito - ecuador
 FOLLOW
  • Facebook B&W
  • Twitter B&W
  • Instagram B&W
 RECENT POSTS: 
bottom of page